“Quiero una página web distinta a todas, que impacte, exclusiva, la primera en Google, ¡¡La mejor!!…”
En ocasiones, afirmaciones como esta son las que inician una relación, que terminará resultando difícil, entre el cliente y la empresa de diseño y programación. Y este tipo de afirmaciones ya no provocan asombro entre los profesionales del diseño web, sino escepticismo y la visión de nubes de tormenta en el horizonte.
Vamos a ofrecer algunas pautas a seguir para que cualquier proyecto web llegue a buen puerto.
Lo primero que tenemos que hacer no es sentarnos junto al diseñador para elegir una plantilla o crear un diseño original y nunca visto por nadie. El diseñador debe entrar en juego cuando sepamos qué queremos hacer y para qué lo queremos, y solo cuando tengamos claros estos dos puntos es cuando hay que transmitirle al diseñador la idea para que la desarrolle gráficamente..
Y para saber qué queremos y para qué, debemos preguntarnos ¿Por qué mi cliente querrá visitar mi página web?.
Veamos que es lo que NO se tiene que hacer en el diseño y lo que SÍ, se puede hacer, o al menos, a tener en cuenta:
NO HAGAS:
- No crees una página sin saber los objetivos que se pretenden, el perfil de los clientes y visión de futuro.
- No pienses que tu página es como el catálogo de tu empresa.
- No aceptes páginas bonitas sin tener en cuenta al cliente/visitante! (Usabilidad).
- ¡No aburras!. No incluyas contenidos como si de un libro se tratara.
- No incluyas animaciones ni demasiados gráficos. A los buscadores no les gustan nada…
- No copies a la competencia: “¡Quiero una como esta!“.
- No pienses que los visitante entran siempre por la página de inicio.
A TENER EN CUENTA:
- La web debe estar diseñada para el cliente, no pensando en el producto. La web es un canal de comunicación, y debemos centrarnos en el cliente.
- Los objetivos de la página deben aparecer claramente, expresados con precisión.
- La web es un elemento más dentro de la estrategia de marketing de la empresa.
- Los contenidos deben ser acordes con el objetivo de la empresa.
- La facilidad de uso, navegación y búsqueda es fundamental.
- Hay que respetar la privacidad y la seguridad de los visitantes.
- No te olvides de medir todo lo que ocurre en tu página y ver si estas medidas están alineadas con los objetivos propuestos.
- Acuérdate de que la web debe estar bien optimizada para los buscadores. Si no, no aparecerás.
Estas son algunas consideraciones importantes que pueden ayudarte en el momento de plantearte crear una web para tu empresa, o rehacerla si se ha quedado obsoleta o no cumple con sus objetivos.
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